La comprensión lectora es una habilidad imprescindible que todo lector ha de tener, pero no es la única y en esta entrada vas a conocer las habilidades necesarias para convertirte en un buen lector. Ser un buen lector es imprescindible para mejorar tu rendimiento académico.
La velocidad lectora es tan importante como la comprensión, puesto que se considera un aspecto significativo para que el estudio y el aprendizaje sea más eficaz.
A continuación te vamos a mostrar cuáles son las ventajas de de leer con fluidez y te daremos algunos consejos para que seas mejor lector.
La velocidad lectora aporta algunas ventajas a la lectura, y es que ayuda a la comprensión global de las ideas que transmite el texto, cuestión que no sucede si la lectura es lenta y menos fluida, pues no logramos abarcar el significado y comprensión de oraciones y párrafos completos. Sin embargo, con una lectura fluida, podremos hilar ideas, lo que contribuye a un aprendizaje más óptimo que nos ayudará a asociar, relacionar y razonar conceptos e ideas, lo cual es un aspecto esencial en el estudio.
Pero tampoco es recomendable leer excesivamente rápido si ello contribuye a no entender y comprender lo que se está leyendo. Por tanto, el nivel ideal de velocidad lectora será cuando leas de forma fluida y rápida y la la vez estés entendiendo y comprendiendo lo se estás leyendo. Cuanto más rápido y efectivo sea este proceso, mejor lector serás.
Otras ventajas que aporta la lectura fluida son:
- Desarrollo de la memoria a corto, medio y largo plazo.
- Desarrollo de la imaginación,
- Coordinación de mecanismos físicos, mentales, psico-lingüísticos, cognitivos y sociales.
- Aprender a discriminar mejor la información.
- Favorece la comprensión y la concentración.
Consejos para ser un buen lector y mejorar tu velocidad lectora:
- No mover la cabeza al leer.
- No seguir la línea con el dedo.
- Mover únicamente la vista.
- Centrar la vista en la parte superior de las letras.
- Utilizar un atril.
- Ampliar el campo de visión (abarcar el mayor número de palabras posible en cada movimiento ocular).
- No vocalizar ni mover los labios al leer.
- Ser consciente de la comprensión del texto.
Si quieres medir tu velocidad lectora y entrenarla para que sea más fluida, aquí te facilitamos dos enlaces:
¡Un buen lector se hace con la práctica. Lee regularmente!
OrientaNova, consejos que facilitan la vida académica